La calidad de nuestros vínculos impacta en la calidad de nuestra vida
Hay muchas maneras de interactuar entre los seres humanos, somos todos diferentes. Como hay muchos idiomas en este planeta, hay muchos lenguajes relacionales. Tenemos que aprender a no tomar nuestro propio lenguaje vincular como la norma o como las cosas deben ser, sé curioso para ver como el otro piensa, siente o vive diferente a vos.
El autoconocimiento es fundamental para desarrollar una empatía auténtica. La empatía no se trata solo de ponerse en los zapatos de los demás, sino de comprender nuestras propias emociones y experiencias para poder conectar genuinamente con los sentimientos de los demás.
Cuando somos conscientes de nuestras propias heridas, miedos y deseos, podemos reconocerlos en los demás y responder con comprensión y compasión. Además, el autoconocimiento nos permite establecer límites saludables y evitar proyectar nuestros propios problemas en los demás.
La frase que se escucha muy seguido es la capacidad de ponernos en los zapatos del otro, pero ¿es realmente posible? , como me pongo en la piel del otro si esta es mi propia piel. Una piel que tiene mis propias cicatrices y experiencias. La empatía no deja de ser una práctica, en donde entrenamos la propia flexibilidad personal para entender la perspectiva del otro y ver el mundo desde su punto de vista.
El simple hecho de comprender que no todos pensamos, sentimos o vivimos igual no permite ponerle un signo de pregunta a nuestra propia creencia sobre la vida del otro y animarnos a observar mas, a preguntar mas, a dudar mas, y curiosear sobre como el otro puede vivir, sentir o pensar desde su experiencia.
Como en nuestra sociedad hay alguien que siembra, otro que cultiva, otro que empaqueta, alguien que transporta a los mercados, alguien que compra, alguien que vende, etc etc. No todos somos iguales, nos gusta lo mismo, nos dedicamos a lo mismo, o sentimos lo mismo y esa es la magia de la vida en sociedad, nos diferenciamos para armar redes, para nutrirnos, para seguir evolucionando. La práctica constante es aprender a mirar esas diferencias sin juzgar o invalidar al otro. Cada cual en sus zapatos, entendiendo que no hay una talla única para los seres humanos y respetando cada paso o talla que el otro necesita para caminar.
¿Qué experiencias te han hecho más empático?
¿Qué obstáculos enfrentas a la hora de conectar con los demás?